EL ARTE DE EVOLUCIONAR

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La energia del dinero

LA ENERGÍA DEL DINERO

PANTALONES A 10 DÓLARES

Otro aspecto de la desconexión con nuestro dinero es que no nos damos cuenta del poder de nuestras elecciones cuando decidimos cómo gastarlo. Como consumidores, todo lo que compramos afecta al Sistema económico global. Por ejemplo, con el consumismo como nuestra guía, buscamos ‘’tenerlo todo,’’ podamos o no permitírnoslo. La crisis en los créditos, provocada por instituciones prestamistas que dieron créditos a personas que nunca podrían pagarles de Vuelta, es la historia a nivel macro, pero a nivel micro, ? cuántos de nosotros vamos a tiendas baratas para encontrar descuentos que nos permiten comprar las cosas que queremos a un precio asequible, como un par de pantalones por diez dólares? No preguntamos cómo es posible que esos pantalones puedan venderse por el precio de dos cafés de Starbucks, ni tampoco pensamos en cuestionarnos quién está siendo defraudado para que esta ganga sea posible.

Frecuentemente ni siquiera nos importa, simplemente somos felices de ahorrar dinero y tener un par de pantalones decente para ponernos. Desafortunadamente, la realidad detrás de lo que se necesita hacer para poder ofrecer estos pantalones a un precio tan bajo, es posible que no nos haga tan felices. Aunque muchas tiendas baratas tienen políticas similares, centrémosnos en la más dominante del Mercado de los Estados Unidos: Wal-Mark. El fundador de la compañía, Sam Walton, puso en práctica un modelo de negocio que Wal-Mark todavía sigue hoy en día. Su objetivo es dominar el Mercado minorista recortando precios, aumentando así el volumen de ventas y llevando a otras tiendas locales minoristas a la quiebra.

El resultado de sus practicas competitivas significa la pérdida de los negocios locales y del servicio al cliente personalizado, una disminución del surtido de productos para los consumidores y un aumento de talleres de explotación laboral que producen más producto por menos. Un informe de Junio del 2007 realizado por Estudiantes y alumnos en contra de la mala práctica de las corporaciones investigó los procedimientos de auditoria de Wal-Mark a cinco fábricas chinas de juguetes y descubrió que las fábricas tenían que llegar muy lejos para ocultar la explotación laboral. El informe resaltaba que los gerentes realizaban (sesiones de entrenamientos) con los trabajadores sobre cómo responder las preguntas para los auditores, nosotros perdemos pedidos y tú pierdes tu trabajo. En otra investigación como la anterior, el periódico británico The Guardian entrevistó a ocho trabajadores de siete fábricas en Bangladesh, y todos menos uno de ellos explicó que trabajaba doce horas al dia y a veces durante toda la noche para finalizar los pedidos de Wal-Mark. A los trabajadores se les pagaban ocho centavos por hora, un sueldo que no era suficiente para mantener a sus familias. Aunque estos ejemplos puedan sonar atroces, tú y yo tenemos que asumir alguna responsabilidad por estas condiciones de trabajo opresivas. Primeramente, nosotros compramos los pantalones por diez dólares para alimentar nuestro consumismo, sin mirar bajo la superficie para averiguar cómo esos pantalones pueden venderse tan baratos.

¿Qué esquinas se están recortando? ¿Quién se está viendo forzado a renunciar a un salario digno? Fijamos nustro objetivo en un premio efímero e ignoramos las consecuencias. Debemos hacernos más preguntas. Tal como mi padre, el Rav, dice, necesitamos preguntarnos ‘’¿porqué?.

Los Japoneses ha integrado este concepto en su cultura de los negocios y de la industria, adoptando el principio de que debes preguntarte ‘’porqué’’ cinco veces antes de permitirte pensar que has obtenido la respuesta. El método de los cinco ‘’porques’’ utilizado actualmente por Toyota, ayuda a la compañía a enfocarse en la causa del problema en lugar de enfocarse en el síntoma.

En Japón esta técnica forma parte de un modelo de fabricación, pero en realidad todos deberíamos preguntarnos por qué de forma regular. El verdadero motivo de hacernos esta pregunta es para hacernos conscientes del cuadro completo. Una vez lo hagamos, también empezaremos a entender que nuestras elecciones tienen un efecto cuántico, que la energía se genera por lo que hacemos, por lo que elegimos. Al fin y al cabo, es decisión nuestra demandar un par de pantalones por diez dólares, que es el motivo por el cual Wal-Mark los fabrica para nosotros.

Actualmente hablando, hemos perdido contacto con la energía que hay en el dinero. No importa sobre qué se construye una economía, ya que si la población pierde contacto con el valor y la energía del dinero, esa economía no podrá sobrevivir a largo plazo. Si asociamos los pantalones a precio de ganga con el hecho de que un niño estuvo trabajando doce horas para hacer los pantalones que llevamos puestos, ganó ocho centavos por hora y llegó a casa hambriento, no querríamos esos pantalones. No querríamos esa energía cerca de nosotros, y mucho menos sobre nuestros cuerpos.

A todos debería importarnos la energía de las ropas que llevamos y la comida que comemos. Seamos o no conscientes de ello, la energía que hay en todo lo que consumimos o llevamos puesto afecta nuestras vidas y la economía global. Piensa tan solo en lo mucho que ha aumentado el valor del dinero en los últimos años. Un dólar solía significar algo. Hace unos cientos de años con trescientos dólares se podía comprar un buen pedazo de tierra; ahora con ese dinero solo puedes comprarte un par de pantalones de diseño. El dinero tiene poder y nuestra intención debe ser utilizado para generar satisfacción verdadera y para crear riqueza auténtica y duradera para todo el mundo. Tal como lo ilustra la siguiente historia, la energía que hay en el dinero puede ser luz o oscuridad, depende de dónde procede y de cómo la utilizamos. Había una vez un hombre muy simple que trabajaba muy duro, ahorraba su dinero y finalmente se convirtió en propietario de un pequeño bar. Lo inusual de el propietario de ese bar es que tenia una reputación de sabio, por lo que a menudo la gente acudía a él para buscar consejo para resolver sus problemas. Se decía que sus bendiciones eran tan ponderosas que incluso podía resucitar a los muertos.

Intrigado sobre su extraña habilidad, uno de los habitantes del pueblo le preguntó cuál era su secreto. Él dijo: Un día decidí que necesitaba conectar solo con la energía positiva. Cuido todas las personas que trabajan en el bar, me aseguro que sus familias estén bien cuidadas y solo contrato a personas a quien aprecio y que aprecian trabajar conmigo. Esto es lo que me da energía para dar bendiciones y canalizar mensajes positivos para los demás. Piensa en esta historia por un minuto. Aquel hombre que siempre estaba conectado con lo positivo podía haber decidido utilizar esa energía solo para sí mismo, pero en su lugar hizo todo lo que pudo por si mismo y por los demás. Esto le dio el poder para ser más que un hombre normal y corriente.

Una asociación con la positividad es lo que hace falta a la economía mundial. Tal cómo lo explicó Rav Áshlag, para poder ser  y seguir siendo exitosos, debemos tener una conexión con la energía y con un propósito más elevado. En términos prácticos, eso significa que no todo se trata sobre mi; significa que hay algo más en juego, un enfoque más amplio, un sistema universal de causa y efecto. Obtenemos nuestro poder cuando nos damos cuenta de que nuestras elecciones, para bien o para mal, tienen consecuencias y afectan a todo el mundo, no solo a nosotros mismos. 

– Yehuda Berg –


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